miércoles, 25 de abril de 2012

La Momificación

Quizás uno de los aspectos que más conocemos o que más nos llama la atención del Egipto Antiguo son las MOMIAS. Pues bien, el siguiente post va dedicado precisamente a ello.

Toda esta información la tenéis recogida en la siguiente web:

La mayor fuente de información que ha llegado hasta nuestras manos se trata, sin duda, de la recogida por historiador griego Herodoto y la complementación realizada por Diodoro de Alejandría que nos describe también el proceso añadiendo algunos datos.

Herodoto narra el proceso de la siguiente manera:

" Por lo que respecta al duelo y la sepultura, es costumbre que al morir algún sujeto de importancia, las mujeres de la familia se empasten de barro la cara y la cabeza. Así desfiuradas y desceñidas, y con los pechos descubiertos, dejando en casa al difunto, van girando por la ciudad con grandes lloros y golpes en el pecho, acompañadas en comitiva por toda la parentela. Los hombres de la misma familia, quitándose el cíngulo, forman también su coro plañendo y llorando al difunto. Concluídos los clamores, llevan el cadáver al taller del embalsamador.


Allí tienen oficiales especialmente destinados a ejercer el arte de embalsamar, los cuales, al llevarles en cadáver, presentan a los conductores unas figurillas de madera, modelos de su arte, las cuales, con sus colores, muestran al vivo un cadáver embalsamado. La más meticulosa, dicen ellos mismos, es la del sujeto el nombre del cual no me atrevo ni considero lícito publicar. Enseñan preguntando de qué manera, y según qué método desean que se trate el muerto; y después de entrar en tratos y cerrado el contrato, se retiran los conductores. Entonces, quedando a solas los artesanos en su oficina, ejecutan de la siguiente manera el tratamiento de primera clase. Empiezan introduciendo por la nariz del muerto unos hierros encorvados, y después de extraerle el cerebro, introducen sus drogas e ingredientes. Abren después la zona abdominal con una piedra de Etiopía aguda y cortante, sacan por allí los intestinos, purgando el vientre, lo lavan con vino de palma y después con aromas molidos, llenándolo después de finísima mirra, de casia, y de variedad de aromas, de los cuales exceptúan el incienso, y cosen por último la abertura. Después de estos preparativos adoban secretamente el cadáver con natrón durante setenta días, única plazo que se concede para mantenerlo oculto, después se faja, bien lavado, con ciertas vendas cortadas de una pieza de finísimo lino, untándolo al mismo tiempo con aquella goma de la que se sirven comúnmente los egipcios en vez de cola. Vuelven entonces los parientes del muerto, toman la momia y la encierran en un nicho o caja de madera, la parte externa de la cual tiene la apariencia de ser humano, y así guardada la depositan dentro de una habitación, colocándola de pie y acercándola a la pared. Este es el método más exquisito para embalsamar los muertos".



Diódoro nos describe así la momificación:

"Cada vez que muere alguien sus parientes se ungen la cabeza de barro, deambulan por la ciudad entre lamentos, hasta que el cuerpo recibe sepultura. No sólo eso, durante este tiempo no se bañan, no beben vino, no comen y no se viste con ropa de colores vivos. Existen tres clases de entierros, el más caro, el mediano y el más humilde. Si se opta por el primero, dicen que el precio es de un talento de plata, el segundo, veinte minas, y si se escoge el tercero dicen que el precio es muy bajo. Los hombres que se ocupan de los cuerpos son hábiles artesanos que reciben todos sus conocimientos profesionales de sus antepasados, ya que es una tradición familiar; estos exponen a los parientes del difunto una lista de precios de cada   llamado el parascytes (cortador), practica la incisión, como la ley ordena, con una piedra etíope y en seguida, echa a correr, y todo los presentes lo persiguen y le lanzan piedras, le insultan, tratando de castigar la profanación que acaba de cometer, puesto que a sus ojos, todo aquel que se comporta violentamente o hiere a otro de la misma tribu merece el odio general. Por contra, los hombres llamados tariqueutas (embalsamadores) son tratados con la mayor consideración y reciben muchos honores, similares a los que reciben los sacerdotes, e, incluso, entran y salen de los templos sin problemas, como si estuviesen libres de toda sospecha. Después de que el cuerpo haya sido abierto, uno de ellos introduce su mano a través de la abertura del cadáver y le extrae todo excepto los riñones y el corazón, y otro limpia las vísceras una a una, lavándolas con vino de palma y especias. Generalmente aplican con cuidado al cadáver durante treinta días aceite de cedro y otras preparaciones, después mirra, canela y otras especias que tienen la facultad no solamente de preservar el cuerpo durante mucho tiempo sino también de conferirle un olor agradable. Después de tratar el cuerpo lo retornan a los parientes.”

Ninguno de los dos hace referencia a la destinación de las vísceras. Estas se introducían en los llamados vasos cánopes (en honor al dios Cánopo) y estaban protegidos por los cuatro hijos de Horus, que estaban esculpidos la mayoría de veces en sus tapas. El estómago y el intestino grueso se guardaban en el vaso de cabeza antropomórfica correspondiente a Amset y sus inscripciones pedían la protección de la diosa Isis, además se relacionaba con el punto cardinal del sur; el intestino delgado en el vaso cinocéfalo, protegido por el dios Hapi invocaba a la diosa Neftis y se asociaba al norte; en el tercero, de tapa en forma de cabeza de chacal, se introducían el corazón y los pulmones y lo vigilaba Duamutef, lo protegía la diosa Neith y se identificaba con el este; el último vaso, con cabeza en forma de halcón, estaba custodiado por Qebehsenuf y contenía la vesícula biliar y el hígado, estaba protegido por Selkis y se asociaba al oeste. En realidad este intento de asociar un órgano a un vaso no se cumplía siempre y encontramos una gran diversidad de combinaciones, según el autor al cual recurramos. Los vasos, a su vez, podían estar guardados dentro de un cofre que tenía la función de protegerlos e incluso en el interior de nichos construidos para tal efecto. El vendaje es otra de las cosas que quedan un poco en el aire. Al retirarse el cuerpo de su cobertura de natrón se lavaba y rodeaba de multitud de finísimas vendas impregnadas en goma arábiga. El encargado de ejecutar esta tarea era el coacytes. Entre ellas se introducían una serie de amuletos destinados a proteger el difunto, hecho que provocó, a lo largo de muchos años, la violación de tumbas por los busca-tesoros, que destruían las momias en busca de los amuletos y las joyas que llevaban entre el vendaje. El proceso de aplicación de vendas finalizaba con un recubrimiento hecho con vendas de tela más gruesa.

            Los oficiantes tenían carácter sacerdotal y recibían el nombre de sacerdotes-ut junto a ellos trabajaba un sacerdote lector, que era el encargado de recitar los pasajes del ritual, como se dice que hizo Isis por vez primera. Entre estos rituales destaca el de la apertura de la boca que consistía en devolver al ser el uso de la boca y otorgarle las facultades por las cuales la vida se manifiesta. En los funerales este rito se efectuaba primero en la sala de embalsamamiento y otra vez antes de sepultar al difunto. Lo dirigían el sacerdote sem, que representaba Horus. Este tocaba el rostro del difunto con una azuela y después con un cincel para devolverle el uso de la boca y los ojos, con lo que podía volver a hablar, ver y comer. Todo esto se acompañaba de la quema de sustancias olorosas (sahumerios), purificaciones rituales, sacrificios y diversos actos que podían variar. Les oraciones recitadas están recogidas en el Libro de los Muertos.



Aquí os pego el siguiente video sobre el significado y proceso de Momificación:




9 comentarios:

  1. si no se hubiese creido en OSIRIS y en IRIS, esto de la momificacion no esistiese???

    ResponderEliminar
  2. Ok Paula ahora cambio el color para que se vea!!

    ResponderEliminar
  3. Laura si no tuvieran la creencia en el más allá gracias a la leyenda de osiris no hubiese existido ya que ese dios fue el primer momificado.

    ResponderEliminar
  4. Laura si no tuvieran la creencia en el más allá gracias a la leyenda de osiris no hubiese existido ya que ese dios fue el primer momificado.

    ResponderEliminar
  5. Da un poquiiito de asco esto jejejeje y si que teniiian poder los dioses para que los demas hicieran todo esto!!

    ResponderEliminar
  6. Es increible el proceso de momificar a una persona. ¡Le vacían del todo!

    ResponderEliminar
  7. Me ha impactado las herramientas que usaban. Son auténticos cirujanos de su época. Lo que hace la creencia...

    ResponderEliminar